domingo, 26 de abril de 2015

Crónica de las III JORNADAS CASETAS LITERARIA - 18-19 de abril de 2015






Llegaron las terceras jornadas. 
Este año resultaban un tanto especiales por las circunstancias personales y por final de ciclo en la comisión de cultura. También la Asociación de Vecinos tomaba parte tanto en el patrocinio de los premios del certamen literario como en la preparación del evento, de la mano de la vocal de la asociación Isabel Vaquero. Y, cómo no, Comisión y Casa de Juventud, siempre atentas y dispuestas a arrimar el hombro. Pilar Gaspar, incombustible y bregadora, ideadora hace dos años de las primeras jornadas, no faltó a ninguna de las actividades y eso la eleva aún más en mi ranking de estimables. 

Pero no me desvío de lo fundamental. De lo literario. 
Casetas volvía a llenarse de letras, y desde la organización siempre procurando que cada vez estas sean más atrayentes para los vecinos. Presentaciones y firmas de libros, talleres, cuentacuentos, lecturas y actividades al aire libre, certamen de relatos... Dentro de la sencillez y del humilde presupuesto del que se dispone, nos sentimos una vez más orgullosos; pese a las tímidas asistencias. Mejor o peor, al menos lo hemos intentado.

Pretendiendo difundir las jornadas fuera del barrio, también se introdujo una novedad importante en las bases del certamen de relatos; la participación de cualquier vecino residente en Zaragoza capital y barrios rurales. 
Se hizo hincapié, por otro lado, en los colegios del barrio, visitando a directores y APAs. Lo primero no resultó de suficiente calado y, pese a cosechar cierta decepción, el resultado en los centros de enseñanza nos sorprendió tan gratamente que nos hizo olvidar aquello otro.



SÁBADO, 18 DE ABRIL




Alejandro Corral, instantes antes de la presentación de su primera novela, "El cielo de Nueva York".
 

Y llegaron las jornadas... El primer dia arrancó con la presencia, tan antigua como las mismas jornadas, del ya hijo adoptivo de las mismas, José Luis Corral. Pero en esta ocasión no queriamos que fuera protagonista sino maestro de ceremonias de su propio hijo, Alejandro, quien acababa de debutar con una novela sorprendente como es "El cielo de Nueva York" (Minotauro, grupo Planeta, 2015).



De izqda a dcha: David Rozas (organizador de Casetas Literaria), Alejandro Corral, José Luis Román (alcalde de Casetas) y José Luis Corral.



Román dio por inauguradas las jornadas con un breve discurso.



También Corral padre quiso agradecer al barrio por su invitación a las jornadas y dar paso a la presentación de su hijo.



A camino entre novela negra y thriller psicológico, con ciertos tintes de ciencia ficción, "El Cielo de Nueva York" se ha ganado al público. Es por ello que lleva manteniéndose entre los libros más vendidos en Aragón desde que fue publicado en febrero.



A primera hora de la tarde, Pepe de Uña impartía un interesante taller de guión literario en las aulas del Cívico.





Y poco más tarde, de nuevo en el salón de actos, le tocaba el turno a los chicos del tiempo de Aragón TV con su manual del clima de nuestra comunidad, publicado por Mira editores. Eva Berlanga, casetera de adopción, en ausencia de sus compañeros fue quien nos habló de las particularidades metereológicas de una tierra muy especial para todos nosotros.


José Luis Almenara (concejal de festejos), Eva Berlanga, Pilar Gaspar (concejal de cultura) y David Rozas.



Y tras conocer los entresijos del tozudo clima aragonés, llegaba el momento que estos tres cafres (Rozas, Del Portal y Juapi) y los fans del género Z llevaban esperando; la presentación de El Legado de Christie, la última novela de zombis (¡ilustrada!).



Una infección virulenta de origen desconocido se adueñaba del centro cívico y de las calles del barrio...





Ni grandes ni pequeños estaban a salvo de tan devastador brote... Estos zombis dicharacheros hicieron las delicias del respetable y sorprendieron a todos con su original puesta en escena. El del traje de protección, al no poder contenerlos, optó finalmente por unirse a la fiesta.



Los tres autores firmando a posteriori.



Escritores zaragozanos como Ana Vivancos y David Jasso (en la foto) no quisieron perdérselo.



Y después de tanta infección, tan amigos.




DOMINGO, 19 DE ABRIL








La meteo del domingo no podía habernos acompañado de mejor forma. Como decían aquellos cómicos, "la plaza estaba abarrotá". La lectura pública de El Principito, a cargo de los niños de los colegios San Miguel y Ricardo Mur, tuvo una participación excelente.



Pepe de Uña fue el encargado del prólogo.





Otro de los hitos de esta edición fue la celebración de la I Feria del Libro de Casetas, que contó con la presencia de autores aragoneses como Francisco Javier Aguirre, María Dolores Tolosa, Belén Gonzalvo, Enrique Pellejer y Carmen Bandrés. Pero, cómo no, también autores del barrio como José Antonio Rubio (en la foto, junto al dibujante de cómics César Herce) y un servidor tuvimos nuestro sitio.



Junto a Enrique Pellejer y mis últimas criaturillas; Ángeles de cuatro patas y El legado de Christie.





María Dolores Tolosa cerró las actividades en la Plaza Castillo con un taller de poesía para niños.





No se podían clausurar las jornadas sin conocerse el fallo del III Certamen de Relatos Breves "Casetas Literaria". El jurado, formado este año por Isabel Vaquero (AA.VV), José Antonio Rubio (escritor local), Pilar Gaspar (Cultura), Roberto Malo (escritor) y un servidor (escritor y organizador), no dudó a la hora de seleccionar a los ganadores de esta edición.








 Los ganadores de cada categoría fueron:

Infantil 

"El libro mágico". VERONICA RELANCIO.


Juvenil

"Mi arco iris sin color". MARIA GRACIA TORRES.


Absoluta

"Por fin, Morfeo". RAQUEL PINA.


Mi más sincera enhorabuena a los premiados y todo mi ánimo para el resto, que seguro se esforzarán en futuras ediciones.
Gracias al jurado, a AA.VV., a Casa de Juventud y a Cultura por su tiempo y dedicación, y también a todos los trabajadores a los que, por suerte o desgracia, les tocó dar el callo en el Cívico; sin todos vosotros las jornadas no hubieran sido posibles.







Con una sensación extraña, mezcla de alivio, orgullo y cierta mezcolanza, me despedía de estas jornadas. Alivio porque el tiempo es oro fuera del hogar cuando ha llegado una nueva miembro a la familia; orgullo por la satisfacción personal de haber organizado durante tres años todo este tinglado y por haber dado, con ayuda de mis colaboradores, un empuje cultural más a mi barrio; y mezcolanza (o nostalgia) por la incertidumbre de encontrarme tal vez ante las últimas jornadas literarias de este grupo de Cultura y, por ende, de un servidor en la organización.

Pase lo que pase en el año próximo, no quisiera despedirme de esta crónica sin agradecer especial y entrañablemente a Pilar Gaspar, no sólo por haber ideado este evento por primera vez en Casetas y haber pensado en mí para llevarlo a cabo, sino por la clase de persona humana, luchadora e impulsora que es y por lo que ha ganado este barrio en los últimos años con ella y su equipo.

Gracias también, por supuesto, a todos los autores que habéis pasado por aquí estas y las jornadas anteriores. En la mayoría de los casos desinteresadamente, en aras de difundir y defender la literatura.

Va por tí, Pilar. Va por nuestro barrio. Va por la cultura.

Hasta cuando la vida quiera, Casetas Literaria.




DRG.